5 cosas que deberías intentar probar en la demo gratis de Prey: disponible a partir de hoy

Al auténtico estilo Arkane, el mundo de Prey está repleto de secretos y maravillas. Dispondréis de la posibilidad de recorrer todos los rincones de las instalaciones de investigación Talos I en todo momento (siempre que encontréis la forma de llegar hasta ellos) y seréis ampliamente recompensados si prestáis atención a los alrededores y lo exploráis todo.

También contaréis con un sinfín de opciones al comienzo del juego, pero deberéis estar dispuestos a ir de caza y enfrentaros a los alienígenas Tifón a medida que avanzáis por la Talos I. A continuación, os presentamos cinco cosas de las que debéis estar pendientes mientras jugáis a la hora inicial de la demo de Prey, ya disponible en PlayStation Store.

1. Siente el poder

Cuando localicéis vuestro primer neuromod, tendréis varias opciones. Podéis instalar magníficas habilidades de Hacker para burlar la seguridad de puertas, cajas fuertes y torretas. Podéis optar por la habilidad Vigor para levantar elementos pesados y apartarlos de vuestro camino (o usar esos objetos pesados como proyectiles contra los enemigos).

O puede que estéis más interesados en reparar que en destruir. Si instaláis la habilidad Reparación, podéis arreglar torretas estropeadas, ascensores gravitacionales y robots operadores para desplazaros con mayor facilidad por la estación. Estas son algunas de las habilidades a las que tendréis acceso en la demo.

“Queremos fomentar distintos estilos de juego”, comenta el director creativo Raphael Colantonio. “Si eres una persona de armas tomar, existe la posibilidad de usar únicamente armas y artilugios. Puedes fabricar munición tú solo y jugar con este estilo. No obstante, también queremos que los jugadores sean un poco más indirectos y exploren con los poderes y otras formas de solucionar los problemas”.

2. La ubicación es lo importante

Si os va la investigación, podréis usar hackeos, serpenteos y GLOO para acceder a diversas ubicaciones que no estarían abiertas a los jugadores durante la primera hora del juego. Desde viajar por los conductos de mantenimiento hasta burlar puertas de seguridad o fisgonear los correos electrónicos de los empleados para conseguir códigos de departamentos, Talos I está a vuestra entera disposición.

Aunque no dispongáis de la habilidad Hacker para saltaros las medidas de seguridad, podréis usar el cañón GLOO para crear nuevos caminos a los niveles superiores. En la misma zona del vestíbulo en la que se obtiene el primer neuromod, podéis instalar la habilidad Reparación y arreglar un ascensor gravitacional cercano para subir al siguiente piso; o podéis usar vuestro recién adquirido cañón GLOO para crear un camino improvisado. Sea como sea, os interesa subir al segundo nivel y echar un vistazo por los alrededores. Allí hay varios secretos que descubrir (incluida una nueva y divertida herramienta con la que experimentar).

“Uno de nuestros artistas midió la estación y tiene 700 metros de largo, por tanto se trata de un edificio enorme flotando en el espacio”, dice el diseñador jefe Ricardo Bare. “No quisimos cometer el error de otras muchas estaciones espaciales, en las que está todo muy apretado. Hay pasillos estrechos, por supuesto, pero queríamos que los jugadores sintieran la libertad de movimiento de los espacios abiertos”.

“Hay un mundo entero en la Talos I”, añade Colantonio. “Hay toda una ecología. Hay gente viviendo allí. Hay laboratorios y oficinas, pero la estación también cuenta con áreas recreativas y parques naturales. Hemos trabajado mucho para representar la ostentación de estas megacorporaciones, pero desde la perspectiva del espacio”.

3. Sintonizando

Los juegos parecen incompletos sin una banda sonora estelar. Con los temas de Raphael Colantonio, director creativo de Prey, y el compositor Mick Gordon (el genio que creó la galardonada banda sonora de DOOM), la música de Prey marca las pautas del juego desde el principio.

Desde los momentos iniciales, en los que despertáis al ritmo de los sintetizadores del Mind Game de Colantonio que suena en la radio, hasta los amenazantes acordes arpegiados que acompañan la tensa exploración de la estación, la diversidad de la banda sonora crea la atmósfera perfecta para este thriller psicológico de ciencia ficción.

4. La vida en el espacio

En el inicio de Prey, os encontráis explorando la Talos I justo después de que el caos se haya adueñado de ella. Tras escapar de su confinamiento, los Tifón toman el control rápidamente. Y vosotros llegáis unas horas más tarde. Descubriréis lo ocurrido a través de los mensajes y los correos electrónicos de los empleados en el TranScribe; puede que hasta descubráis cómo localizar a esos empleados.

Alex Yu. Patricia Varma. January. Son algunas de las pocas personas que os encontraréis (y de las pocas voces que oiréis) en la primera hora de Prey. Pero hay muchas más en la Talos I, luchando por sobrevivir. Dependerá totalmente de vosotros si decidís ayudarlas, ignorarlas o hasta matarlas.

“De vez en cuando te encontrarás con personajes que saben quién eres”, comenta Bare. “Conocen cosas sobre ti que Morgan no recuerda, y pueden ayudarte a llenar los huecos por ti. Desempeñan un papel destacado en la historia, y en la evolución general del mundo. Al encontrarte con estos personajes, se producirán distintas consecuencias que repercutirán durante el juego dependiendo de cómo los trates o cómo lidies con ellos; y tendrán un gran impacto en el final. Puedes matar a cualquier personaje del juego. Si se encuentran en la misma habitación que tú, puedes acabar con ellos”.

La Talos I es un personaje más, por supuesto. De hecho, está al mismo nivel que Morgan en cuanto a personajes principales.

“Se puede decir que hemos puesto tanto empeño (o más) en la propia estación como en los personajes principales”, explica Bare. “La estación espacial tiene una historia muy amplia. Tiene una fecha de nacimiento y una duración”.

5. Combate la invasión y salva el mundo

Ha comenzado la cacería a bordo de la Talos I. Los Tifón acechan en los pasillos, se multiplican constantemente y se hacen más fuertes. Desde los escurridizos miméticos, que pueden adoptar la forma de objetos inocuos de la estación, hasta la gigantesca y aterradora pesadilla, no hay muchos sitios de la Talos I en los que estéis a salvo. Deberéis tirar de ingenio y acumular recursos para poder salvar el mundo.

“Como jugador, dependerá de ti descubrir: ¿Cómo he llegado aquí? ¿Qué sucede? ¿Cómo puedo sobrevivir? Y ¿cómo escapo de esta estación espacial?”, comenta Bare. “Deberás usar tu ingenio, las herramientas que puedas gorronear, las armas que encuentres y, finalmente, los poderes que puedas adquirir”.

Puede que empecéis únicamente con una llave inglesa y la voluntad de sobrevivir, pero en poco tiempo (y tras matar a muchos Tifón) os convertiréis en unos portentos de vuestra propia creación. Tanto si decidís ir a todo gas con extravagantes poderes alienígenas como si apostáis por desarrollar vuestras habilidades con las armas y las muchas herramientas que encontraréis en la estación, seréis la última esperanza de una humanidad al borde de la aniquilación.

Porque si un solo Tifón consigue llegar a la Tierra, se acabó.