¡Buenas a todos!
¿Ya habéis probado la demo del gran Dragon Age II? Yo acabo de completarla mientras empezaba a dar forma a estas líneas y tan sólo de pensar lo que nos espera a partir del próximo día 10 se me hace la boca agua. Y vale, cierto es que en su día la versión para PS3 de Dragon Age Origins nos dejó algo fríos debido a los problemas que la conversión desde PC había traÍdo consigo. Sin embargo, os puedo asegurar que ahora es todo diferente. Esta vez EA quiere proporcionar la mejor experiencia posible a todos los usuarios, y entre ellos nos encontramos, por supuesto los poseedores de PS3.
Si habéis jugado con la demo que lleva más de una semana puesta a vuestra entera disposición en PS Store ya os habréis dado cuenta de qué es lo que intento explicaros. Sería una afirmación vaga por mi parte, pero ahora Dragon Age II recuerda por momentos a un beat ’em up, y eso es algo genial cuando entre las manos tenemos un DualShock y no un ratón. ¡Pero tranquilos, no os asustéis! Este sigue siendo un juego de rol a la antigua usanza con el estilo propio e inconfundible de BioWare pues, de hecho, al igual que ocurría en la primera parte, podemos pausar los combates para dar órdenes a los componentes de nuestro grupo y al mismo tiempo reflexionar acerca de las estrategias que vamos a seguir. La diferencia sin embargo es que la lucha es ahora más dinámica, más intensa y más espectacular, algo que EA se ha marcado como premisa fundamental a la hora de aventurarse en el proyecto que supone esta segunda entrega. La idea es que siempre ocurra algo cuando se pulsa un botón, algo que es habitual en otros géneros y que sin embargo no se suele dar en los RPG que no poseen además el sustantivo “action” como prefijo.
Dragon Age II recuerda bastante, a la hora de luchar, a cualquier representante del MMORPG, sobre todo en cuanto a la utilización de habilidades mediante una simple pulsación de botón y la consecuente espera hasta que ésta se carga de nuevo. Sin embargo, hay una diferencia respecto a los habituales cánones del género, y es que cada vez que pulsamos el botón X ejecutamos un golpe. De esta manera podemos aporrear el botón al más puro estilo God of War y nuestro personaje atacará todas las veces que sea necesario. Esto que en un principio puede resultar chocante al rolero más experto da un excelente resultado sin llevar en ningún momento a olvidar la vertiente más táctica de la batalla. Del mismo modo podremos esquivar en tiempo real ataques enemigos, como por ejemplo las embestidas de los monstruos más grandes, simplemente moviendo nuestro personaje con el stick izquierdo. Se trata en definitiva de una acertada adaptación del sistema de combate del primer Dragon Age a la propia naturaleza de PS3.
Todo ello lo podéis disfrutar en esta interesante demo que pone a vuestra disposición los primeros minutos del juego, en el cual, a modo de flashbacks se nos narra la historia de Hawke, el héroe de Kirkwall, un refugiado que huyó de Ferelden junto a su familia y que por avatares del destino acabará siendo el único capaz de impedir la guerra. Ese es uno de los personajes que controlaremos y el único cuya clase y apariencia podremos configurar. Durante este pequeño anticipo os esperan montones de engendros tenebrosos y algún que otro Troll de enorme tamaño, fuerza bruta y mal carácter. Todos ellos te permitirán también apreciar las ostensibles mejoras gráficas de que hace gala Dragon Age II con respecto a Origins y te harán sentir durante un rato el placer de regresar a Ferelden año y medio después de nuestras primeras aventuras.
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