Echando unas partidas con Invizimals: La Otra Dimensión

Después de una semana de locos con todo lo que conlleva Gran Turismo 5 y su lanzamiento por todo lo alto, por fin he tenido un rato para dedicarle unas cuantas horas a Invizimals: La Otra Dimensión. Ya anticipé en su día, cuando jugué por primera vez con Eye of Judgment que esto de la realidad aumentada podía dar mucho juego, y el primer Invizimals acabó por confirmarlo.

De hecho si algo me ha quedado claro es que PSP es la plataforma idónea para disfrutar este invento. Su mayor movilidad respecto a PS3 y la ventaja de contar con una cámara de diminuto tamaño hace que ir de un lado a otro tratando de detectar criaturas invisibles sea un trabajo cómodo además de divertido.

Esta segunda entrega de Invizimals ha sabido hacer crecer la experiencia de juego al contar con una gran idea ya asentada, un año más de experiencia y muchas ideas que aportar a un título que se convirtió por méritos propios en uno de los mayores éxitos de PSP en el mercado español. Novedades incluye muchas, entre ellas por supuesto nuevos monstruos que capturar y entrenar para derrotar a nuestros rivales. Pero si en algo me ha sorprendido principalmente este Invimals: La Otra Dimensión es en la mayor variedad de situaciones de caza que ofrece respecto a su precuela.

Ahora, capturar a cada Invizimal constituye un impresionante ejercicio de originalidad por parte de los creativos de Novorama. Los minijuegos que te permiten hacerte con estas criaturas son diferentes, divertidos y en algunos casos sumamente ingeniosos. ¿Quieres echar una carrera por un recorrido invisible sólo existente para tu cámara o tumbar una hiena de la risa? Bueno, pues esa es la tónica general de un juego en el que tan pronto te verás inclinando tu PSP como soplándole al micrófono.

Invizimals: La Otra Dimensión presenta también otro tipo de retos en forma de puzzle aparte de los ya comentados momentos de caza. A lo largo de nuestra aventura nos encontraremos con otras dos obligaciones principalmente. La primera de ellas es montar circuitos eléctricos en los que deberemos orientar cristales y otras piezas diversas de modo que el rayo que aparece en pantalla llegue a su destino. El segundo en cambio es un clásico rompecabezas donde nuestro cometido será rotar y unir varias piezas para ensamblar los emblemas de la Alianza, un selecto club de cazadores de Invizimals al que podremos acceder al comienzo del juego.

Lo demás es lo que ya conocemos, emocionantes combates contra otros cazadores, vectors que podemos utilizar para potenciar o curar nuestras criaturas y posibilidades de personalización que, en esta segunda parte han aumentado considerablemente. Todo esto, por supuesto, sin olvidar el espíritu patrio que impregna este título de desarrollo plenamente español que encuentra inspiración, como demuestran los primeros minutos de la historia, en el maestro Gaudí. Un juego de nuevo largo, divertido, profundo y de la tierra. ¡Así se hace!