Bienvenidos a la aventura y la exploración en la preciosa isla de Gemea.
Si echamos la vista atrás, puede parecer una auténtica locura. Todos éramos empleados ‘seniors’ y trabajábamos en títulos AAA en estudios muy respetados como Activision o Rocksteady, entre otros. Siempre tocábamos juegos de mucho presupuesto, con campañas de marketing de altos vuelos, ventas espectaculares y halagos de la crítica… Una posición envidiable para un desarrollador de videojuegos, ¿verdad? Entonces, ¿por qué decidimos apartarnos de todo aquello?
Bueno, teníamos una idea en la cabeza que queríamos desarrollar sí o sí. Disfrutamos con una gran variedad de juegos, como Harvest Moon, Animal Crossing, Zelda o Skyrim, pero queríamos crear una experiencia que combinase las sensaciones y emociones de todos ellos. Puede parecer una combinación extraña, lo sé, pero estas fueron algunas de las influencias clave que inspiraron el diseño de Yonder. Así que tomamos la difícil decisión de dejar nuestros trabajos bien pagados de alto nivel para jugárnosla como nunca habíamos hecho.
Yonder es el juego con el que hemos soñado jugar desde la primera vez que cogimos un mando. Está ambientado en la enorme isla de Gemea, un lugar exuberante con ocho entornos distintos que van desde playas tropicales a cumbres nevadas. Cada ubicación tiene su propia flora y fauna, además de estaciones cambiantes y un ciclo de día y noche. Gemea fue antaño el paraíso perfecto, pero una oscuridad maligna cubrió de desesperación a esta tierra y a sus habitantes…
Queríamos un mundo que transmitiera una sensación familiar y relajada. Yonder sería un juego que podrías coger, entrar en él y sentirte como en casa. Era importante que fuese lo más cómodo y acogedor posible.
Es un juego que podéis jugar a vuestro ritmo; no todo es imprescindible. Queríamos que los jugadores tuviesen libertad de acción en el juego, libertad para cumplir sus metas.
En Yonder vosotros sois los protagonistas, por lo que vuestro aspecto o forma de vestir no están restringidos. Depende de vosotros y de nadie más. ¿Habéis cogido un par de kilitos durante las fiestas? Lo entendemos… y vuestros avatares pueden reflejarlo. ¿Queréis un buen bigotón o una falda de flores? Vuestro personaje puede llevarlo (¡incluso los dos a la vez!). Descubriréis un montón de objetos para que vuestro protagonista sea único.
Los animales (o “criaturas”, como preferimos llamarlas en la isla) siempre fueron una parte importante del juego. En Yonder encontrarás una gran variedad de criaturas adorables a la par que útiles: desde los lentos rebaños de Groffles a los bonitos y esponjosos Fabbits.
Con una isla enorme que explorar y una gran cantidad de vecinos con los que trabar amistad, pronto comenzaréis a aprender muchas habilidades nuevas. Pesca, carpintería… e incluso elaboración de bebidas. Todas estas actividades os ayudarán a resolver los misterios de la isla de Gemea con la esperanza de encontrar el camino de vuelta a casa.
Domesticad un Fabbit para que sea vuestra mascota. Montad una granja y haced queso con leche de Groffle para comerciar con los vecinos. Cultivad vegetales y regatead en el mercado, o fabricad vuestras propias cosas. Vuestra influencia en el mundo se extiende más allá de vuestro guardarropa o cofres; vuestras acciones tienen efectos en todos los pueblos de Gemea.
El equilibrio entre aventura, personalización y descubrimiento de Yonder es el viaje en el que siempre quisimos embarcarnos, y nos alegra traer este juego a PlayStation 4. ¡Nuestros años de soñar despiertos pronto se transformarán en una experiencia que podréis disfrutar en casa el 18 de julio!
Así que, ¿de verdad fue una locura dejar de lado los estudios grandes? Supongo que muy pronto lo averiguaremos…
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