Modo hardcore: por qué el modo Incondicional de Diablo III es la mejor forma de jugar al juego de rol de Blizzard

En el primer episodio de nuestra nueva serie del PS Blog, analizamos los mejores ejemplos de juegos más difíciles de PlayStation (y para celebrar que mañana estará disponible el nigromante) hablamos con Blizzard sobre su dungeon crawler: Diablo III.

Los juegos en los que se recompensa a los jugadores por su tiempo con incentivos (habilidades, moneda del juego, equipo o nuevas zonas para investigar) normalmente les permiten mantener su botín y sus progresos aunque su personaje sufra una muerte horrible.

Ni siquiera esos juegos que hacen pagar a los jugadores por sus fallos les quitan todo; si mueres pagas una penalización, pero tu personaje no desaparece del todo (por ejemplo, EVE: Online, o los juegos de la saga Dark Souls). Los jugadores verán desvanecerse sus puntos de experiencia, armas e incluso una parte de sus progresos, pero el avatar en el que se han convertido volverá de alguna forma.

Ese no es el caso en el modo Incondicional de Diablo III, que tiene un aspecto que casi no se ve en los videojuegos modernos: muerte permanente. Los jugadores que prueben Diablo III en esta dificultad deben saber que en algún punto podrán encontrarse contemplando con horror como entidades demoníacas convierten en picadillo al personaje en el que han invertido tanto tiempo, lo que significa que habrá desaparecido para siempre.

Por cierto, las probabilidades de que esto suceda son bastante altas. Como cabría esperar, los enemigos (especialmente los enemigos especiales finales) son mucho más peligrosos y letales que en los modos más sencillos. De nuevo, esto se equilibra con el hecho de que el botín que dejan es mucho más valioso.

Para aquellos que no conozcan el dungeon crawler de Blizzard, el modo Incondicional puede parecer más que complicado. Pero para los fieles a Diablo, así es como debería jugarse.

“El modo Incondicional es una opción que tiene una historia importante en la franquicia Diablo“, comenta el diseñador de juego jefe de Diablo III, Joe Shely. “Cuando miramos las cosas que les gustaban a los aficionados de Diablo II, intentamos llevarlas a Diablo III siempre que fuera posible”.

Cómo Blizzard se dedicó a equilibrar este modo

Dado que en Diablo III hasta cuatro jugadores pueden participar en una partida cooperativa, usando personajes con una enorme variedad de habilidades y ataques muy diferentes y variados, equilibrar el modo Incondicional supuso un inmenso desafío para los desarrolladores. Sin embargo, Shely afirma que, aunque el proceso fue una pesadilla para el equipo de control de calidad, el modo Incondicional se convirtió en una parte casi viva del juego. Los jugadores podían establecer su propia dificultad, hasta cierto punto, y el modo sigue evolucionando hasta hoy.

“Hay un tira y afloja inherente entre el riesgo que supone perder un personaje para siempre y el intento de llevar al personaje tan lejos como se pueda y enfrentarse a partidas más desafiantes”, dice Shely. “Así que, como el jugador tiene mucho control sobre cómo será la partida en cualquier sesión, depende de nosotros integrar el modo, incentivando el tipo de juego que hace que el modo Incondicional sea tan divertido”.

La definición de ‘divertido’ de Shely puede no ser la misma que la de muchos otros jugadores, pero los veteranos de Diablo saben exactamente a qué se refiere. En el modo Incondicional, la tensión del juego aumenta considerablemente, porque los jugadores se juegan el cuello de su personaje con cada enfrentamiento. Además, la perspectiva de mirar a la cara de la muerte con regularidad encaja muy bien con la atmósfera gótica del juego; algo que parecería raro con un nivel de dificultad más suave.

Cómo el Modo Incondicional incentiva a los jugadores a desafiarse a ellos mismos

“Si el jugador quiere, puede jugar con su personaje en un entorno en el que no hay mucho peligro. De acuerdo, eso no es tan emocionante, porque en teoría podrías perder a tu personaje, pero no le da a la experiencia el valor que nos gustaría”, dice Shely.

Para que el modo sea más divertido, Shely afirma que los desarrolladores se esforzaron para tentar a los jugadores hacia situaciones cada vez más arriesgadas. Esto va más allá de añadir botín más valioso, hasta la introducción de una mecánica que es parecida a lanzar cebo al mar para atraer a los tiburones.

“Hacemos cosas que se aseguran de que los jugadores tomarán riesgos que hacen que este modo sea divertido. En la superficie, esto puede parecer ilógico, pero añadimos un efecto pasivo a cada clase que, durante unos segundos, evita que mueras si tu salud llega a cero”, comenta Shely.

“Podría pensarse que esto hace que el juego sea más sencillo, dado que ahora tienes una red de seguridad que no parece encajar con un modo con muerte permanente, pero descubrimos que tener algo así aumentaba mucho la tensión”, afirma. “Le da a los jugadores un incentivo y la oportunidad de jugar en el modo Incondicional en un entorno de gran riesgo / gran recompensa, que es lo que debería ser”.

El ascenso del Nigromante

El modo Incondicional de Diablo III está preparado para evolucionar aún más con la llegada de una nueva clase de personaje: el nigromante. Internamente, el juego ha sido probado a fondo en todos sus modos de dificultad; había que conseguir un equilibrio y hacerlo evolucionar, no solo por las nuevas habilidades y progresión del nigromante, sino también por cómo este personaje funciona como parte de un grupo que puede estar formado por hasta cuatro jugadores, usando hasta otras seis clases. Y esto antes de que los desarrolladores empezaran a añadir nuevas armas y equipo a la mezcla.

“Uno de los puntos fuertes de Diablo III es lo locos que podemos volvernos con los objetos que pueden conseguir los jugadores”, comenta Shely. “Establecimos bonificaciones y creamos objetos legendarios y los llevamos a los niveles más fantásticos y extremos. Dejamos que rompieran muchas reglas”.

“De modo que equilibrar todo esto es un desafío enorme, por lo que antes de su publicación probamos al nigromante en un entorno público, en el que nuestros jugadores entran voluntariamente para ver cómo se comporta”, afirma.

“Este tipo de prueba de amplio espectro nos permite repetir y depurar, y sobre todo equilibrar la jugabilidad, para que cuando el nigromante esté al fin en el juego sea tan increíble como las otras clases pero no se convierta en una bola de demolición”.

Los mejores consejos para enfrentarse al modo Incondicional de Diablo III

Importante:

• Ten siempre una ruta de huida o una forma de escapar del peligro. No dejes que te arrinconen.
• Concéntrate en mejorar tu personaje de forma que estés cómodo jugando con él, pero asegúrate de tener habilidades y objetos defensivos.
• No tengas miedo a verte envuelto en situaciones peligrosas.

Nunca:

• Entres en una partida preparada para un nivel de personaje superior al que tienes.
• Te apresures. Procede con cautela, especialmente en zonas en las que no has estado antes.
• Seas un lobo solitario. Si estás en un grupo, mantén cerca a tus aliados, porque alejarte de ellos podría ser tu perdición.