Este año ha traído un montón de juegos alucinantes a PlayStation, y estas son algunas de las tendencias surgidas de una selección de los mejores títulos de 2024.
Cierto es que las trepidantes aventuras de 2025 se acercan vertiginosamente a nuestras pantallas, pero todavía tenemos tiempo para deleitarnos en las alegrías que nos ha traído este 2024. Desde robots brillantes y mundos arrebatadores hechos de bloques de LEGO hasta aventuras fantásticas y clásicos remasterizados, hemos tenido de todo y para todo el mundo.
Un año de RPG colosales
Han sido doce meses fascinantes para los extensos territorios mágicos llenos de héroes con poderes mágicos, orejas puntiagudas y ciudades flotantes. Atlus, los creadores de Persona, nos sorprendieron con el novedoso mundo de Metaphor ReFantazio, gracias al que recibieron merecidos elogios en abundancia por sus meditadas mecánicas de combate, una presentación elegante y ese tema bélico.
De igual forma, Final Fantasy VII Rebirth acometió la ardua tarea de recrear uno de los RPG más influyentes de todos los tiempos y conservar el tirón de su predecesor, el universalmente celebrado Final Fantasy VII Remake. Sin alejarnos de lo fantástico, el frenético RPG de acción Granblue Fantasy: Relink nos ofreció un refrescante combate cooperativo a la altura de su historia expansiva, mientras que Dragon Age: The Veilguard puso la guinda al pastel con una misión cautivadora y una emocionante banda sonora creada por dos titanes de la composición: Hans Zimmer y Lorne Balfe.
Con los pies algo más en la tierra (en términos relativos, claro), Like A Dragon: Infinite Wealth supuso un acicate para aquellos fans de los RPG que prefieren calles mugrientas a hojas de hechizos gracias a un entretenido sistema de combate y a la diversión de su expansión, que profundizaba en el universo de la yakuza.
Un año de clásicos remasterizados
Dispuesto a no dejarse enterrar por la avalancha de nuevos títulos diseñados para estimular la imaginación, el contingente de clásicos con algo más que una nueva capa de pintura también ha sido impresionante. Este símil viene que ni pintado, puesto que Disney Epic Mickey nos trajo de vuelta al ratón más icónico con nuevas habilidades a la altura de unos gráficos bellamente actualizados.
Hablando de iconos, los fans de Lara Croft dieron con una familiar veta de oro en Tomb Raider I–III Remastered, pero esta no ha sido la única maravilla arqueológica desenterrada este año. Broken Sword – La Leyenda de los Templarios: Reforged nos puso de nuevo en la senda de George Stobbart y Nico Collard en busca de los secretos arcanos de los Caballeros Templarios en una versión mejorada y en 4K de este clásico de aventuras.
En otras galaxias un poquito más lejanas, tanto Star Wars: Dark Forces Remaster como Beyond Good & Evil 20th Anniversary Edition nos ofrecieron delicias de ciencia ficción en los géneros de shooter en primera persona y acción y aventuras, respectivamente, y la cuota de RPG favoritos de los fans igualmente épicos la aportaron Grandia HD Collection y Persona 3 Reload. Ah, y para quienes tuvieseis antojo de acción remasterizada de zombis, Capcom sacó toda la artillería empotrando en nuestras pantallas Dead Rising Deluxe Remaster con un variopinto despliegue de mejoras… muy sesudas, por así decirlo. Y ahora que sale el tema del terror…
Un año de terror y sustos de inspiración retro
Mientras que muchas remasterizaciones aspiraban a subirnos las pulsaciones, unos cuantos juegos regresaron para helarnos el corazón. Silent Hill 2 salió de entre la niebla en plena forma para asustarnos con un asombroso remake que volvió a plantearnos encuentros horripilantes con Pyramid Head, si bien con una presentación en alta fidelidad que no hacía sino mejorar su inolvidable historia.
También pudimos disfrutar de una macabra cabalgata de nuevos títulos igual de capaces de erizar el vello de eso que empleáis para sujetar los mandos. Para quienes disfrutáis de los detalles más retro, Crow Country encapsuló el juego de terror y supervivencia de toda la vida con un estilo visual familiar, el de PlayStation en los 90. De forma similar, Fear the Spotlight jugaba con una estética de la vieja escuela para darle a su estremecedora narrativa un matiz más intenso, mientras que los años 80 también se vieron representados en las divertidas e inquietantes emociones del multijugador asimétrico Killer Klowns from Outer Space: The Game, basado en la película de culto de 1988.
Quienes buscaban sustos más contemporáneos se decantaron por Still Wakes the Deep, un título de terror psicológico con pinceladas cósmicas fenomenalmente escrito, arrebatador y claustrofóbico. Aunque para cósmicos, los sustos rotundos de la aventura de realidad virtual y combate que planteaba Alien: Rogue Incursion, también aterrador. Aunque en el salón todos pudieron oír vuestros gritos.
Un año de plataformas con personalidad
Dejar huella en un género como el de plataformas no es sencillo, pero 2024 sentó un precedente que esperamos que sirva de ejemplo en el futuro. El buque insignia de este año no podía ser otro que el tremendamente imaginativo y encantador Astro Bot. Esta aventura repleta de diversión y singularidades se convirtió en un clásico instantáneo gracias a su diseño de niveles imaginativo, un uso impecable del mando inalámbrico DualSense y algunos cameos inolvidables.
Pero también queremos mencionar un par de éxitos chulísimos que podríais haber pasado por alto. Un soulslike acuático, Another Crab’s Treasure, nos permitió zambullirnos en el mundo de acción y aventura de Kril, un cangrejo ermitaño gruñón capaz de usar la basura desperdigada por el entorno como armas y armadura. Penny’s Big Breakaway, por su parte, supuso un soplo de aire fresco, un homenaje luminoso y colorido a una época de frenéticas plataformas móviles en la que la heroína debe limpiar su nombre mientras burla al ejército de pingüinos descerebrados de Eddie el Emperador. Es tan salvaje como parece.
Un año de diseños de arte creativos
2024 también produjo algunos títulos memorables estéticamente que, además de permitirnos gozar de una identidad visual inconfundible, también nos hicieron disfrutar jugándolos. La bellísima animación stop-motion artesanal de Harold Halibut es la guinda del pastel de un proceso de desarrollo de 10 años en el que los dioramas físicos fueron escaneados y añadidos al juego, dando como resultado una encantadora aventura gráfica con una estética rompedora.
Un potente uso del color y el contraste era el sello visual de Neva, un bello juego de plataformas con los rompecabezas como eje conductor, mientras que la descacharrante aventura Thank Goodness You’re Here! se lo jugaba todo a un humor absurdo con un estilo brillante y atrevido que remitía a los clásicos (e igualmente excéntricos) cómics de humor británicos.
Igual de atrevido pero, además, compacto, fue LEGO Horizon Adventures, una juguetona vuelta de tuerca de Horizon Zero Dawn. Su inventiva visual se veía reforzada tras la revelación de que todo lo que podéis ver en el juego, incluidas sus imponentes e impresionantes máquinas, puede construirse en el mundo real empleando piezas y escenarios de LEGO.
¿Qué juegos y sus tendencias correspondientes fueron vuestros preferidos en 2024?
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